por. Facundo Ezequiel
Cuando miro hacia atrás
lo que fuimos
hace sombras
a mis espaldas
y el futuro
pierde el fulgor
de la esperanza.
Toda fina dama
tiene algo de vos
y tu recuerdo
se perpetúa
en mi contemplación;
no hay nada
más hermoso
que esta daga inquieta;
mantiene
mi alma
en forma
y
humilde
mi cabeza.
Maldigo el día
en el que me muera
y tu recuerdo
pase a ser
otra cosa
que
ya
no
es.