por. Facundo Ezequiel
El amor es
una estafa publicitaria
me digo
cada vez
que pienso
en esta mujer
Prendo la tele
y pongo el canal
de las mujeres
que posan
El amor también
está acá
está en todas partes
si tenés
ojos y oídos
Espero que haya
algo más
en todo este
asunto
del amor
Estas mujeres
se están poniendo
peligrosamente
flacas
y
mis brazos
extrañamente
desproporcionados
Debe haber
algo más
o
pronto
me voy a
enterar
que
todo es
un
engaño
:
la democracia,
el capitalismo,
el comunismo,
Dios,
incluso
los precios en
los estantes,
la duración
de las pilas,
el reloj que
trompeo todas
las mañanas,
Papá Noel,
el Ratón Pérez,
los impuestos,
la capa de ozono,
el ejército,
la televisión,
Greenpeace,
las estafas,
el arte,
el sentido común,
el trabajo,
el lenguaje,
los consejos,
la medicina,
el parentesco,
las drogas,
el cielo,
las matemáticas
TODO
quiero decir
TODO
absolutamente
TODO
quizá también
la Muerte
La idea es
desalentadora
y el hecho
de que
la provoque
una mujer
que apenas
conozco
es
casi
una
doble
negación
No soy nadie
para ella
—ni para nadie—
pero
no puedo esperar
a verla de nuevo.
Todos estos pensamientos
no son sino
otra forma
de
masturbación,
un tanto
más obscena,
debo decir
miércoles, mayo 26, 2010
miércoles, mayo 05, 2010
El canal de los animales
por. Facundo Ezequiel
La vida se pone difícil
cuando se intenta
complacer a
los demás
pero es peor
si se intenta
complacer
uno
a sí mismo
ella lo sabía
porque se lo expliqué
mientras estábamos
desnudos
en la cama
“nunca nada
sale como lo planeo”
dije
“así que dejé
de planear las cosas”
hicieron falta
algunas cervezas
y un
excepcional
buen humor
para que
yo
dijese tanto
pero
ella
no parecía
de tan buen humor
probablemente
no la hice
acabar
era seguro
que yo había
acabado
un buen par de
veces
buen buen humor
me dio la espalda y
apagó el velador
prendí un cigarrillo
y la tele
el canal de los animales
era el más sensato
:
el leopardo
siguiendo a este
animal cornudo
que parecía tan
indefenso
ante el veloz
carnívoro —
y después
las crueles
escenas
del leopardo
estirando los
pedazos de carne
y músculo
como chicles
despegándose
de los
huesos
toda la hermosa
trompa sucia
de sangre
yo también
me había
ensuciado
la barba
más de una vez
actuando
como
un animal
toda esa
desesperación
gritos
sangre
dolor :
cuando lo
pensabas parecía
artificial
a mí también
deberían filmarme
para enseñarle
a los niños de la jungla
cómo es la vida
salvaje
en la ciudad
corriendo mujeres
comiendo conchas
rompiendo culos
cuando el leopardo
dejó de comer
su presa ya no era
sino un montón
de colgajos de piel
y huesos
irreconocibles
pensé en
la mujer
a mi lado y
ya no estaba
de tan buen
humor
apenas se había
consumido
la mitad de mi
cigarrillo
no me sentía
muy depredador
¿quién era
la presa?
¿yo? ¿ella?
encogido y
hacia la izquierda
casi
se había
consumido
mi alma
por completo
lo triste es
que
apenas pude
darme
cuenta
La vida se pone difícil
cuando se intenta
complacer a
los demás
pero es peor
si se intenta
complacer
uno
a sí mismo
ella lo sabía
porque se lo expliqué
mientras estábamos
desnudos
en la cama
“nunca nada
sale como lo planeo”
dije
“así que dejé
de planear las cosas”
hicieron falta
algunas cervezas
y un
excepcional
buen humor
para que
yo
dijese tanto
pero
ella
no parecía
de tan buen humor
probablemente
no la hice
acabar
era seguro
que yo había
acabado
un buen par de
veces
buen buen humor
me dio la espalda y
apagó el velador
prendí un cigarrillo
y la tele
el canal de los animales
era el más sensato
:
el leopardo
siguiendo a este
animal cornudo
que parecía tan
indefenso
ante el veloz
carnívoro —
y después
las crueles
escenas
del leopardo
estirando los
pedazos de carne
y músculo
como chicles
despegándose
de los
huesos
toda la hermosa
trompa sucia
de sangre
yo también
me había
ensuciado
la barba
más de una vez
actuando
como
un animal
toda esa
desesperación
gritos
sangre
dolor :
cuando lo
pensabas parecía
artificial
a mí también
deberían filmarme
para enseñarle
a los niños de la jungla
cómo es la vida
salvaje
en la ciudad
corriendo mujeres
comiendo conchas
rompiendo culos
cuando el leopardo
dejó de comer
su presa ya no era
sino un montón
de colgajos de piel
y huesos
irreconocibles
pensé en
la mujer
a mi lado y
ya no estaba
de tan buen
humor
apenas se había
consumido
la mitad de mi
cigarrillo
no me sentía
muy depredador
¿quién era
la presa?
¿yo? ¿ella?
encogido y
hacia la izquierda
casi
se había
consumido
mi alma
por completo
lo triste es
que
apenas pude
darme
cuenta
DGI
por. Facundo Ezequiel
Hacé mal
y el mal
vuelve
Hacé bien
y el bien
vuelve
Hacé
lo que
hacen
todos
y tenés
el nirvana
asegurado
Hacé mal
y el mal
vuelve
Hacé bien
y el bien
vuelve
Hacé
lo que
hacen
todos
y tenés
el nirvana
asegurado
Vos podrías
por. Facundo Ezequiel
La mayor parte
de las cosas
en la vida
son tristes,
si lo pensás.
No hay que
ser muy
inteligente
para darse cuenta :
si querés
ser feliz
no hay que
pensar.
La mayor parte
de las cosas
en la vida
son tristes,
si lo pensás.
No hay que
ser muy
inteligente
para darse cuenta :
si querés
ser feliz
no hay que
pensar.
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